viernes, 12 de diciembre de 2008

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Probando


 

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sábado, 19 de julio de 2008

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Frecuentemente confundo las cámaras fotográficas con armas de fuego.
Una vez, trágicamente, en una boda...

martes, 24 de junio de 2008

Is This The World We Created?



If there´s a God in the sky, looking down...
What can he think of what we´ve done...
To the world that he created...


¿Qué ésta es una mala época?
Pues bien, estamos aquí para hacerla mejor.
Thomas Carlyle

domingo, 22 de junio de 2008

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- Qué pasó con la última salamandra?

- Se quedó dormida en el traje y se asfixió...

sábado, 17 de mayo de 2008

Una Reflexión...

Sobre las ideas de vida y progreso que tienen la mayoría de las personas.

En este caso se evidencia el irrefrenable deseo de que ya llegue el día de mañana, con esto me refiero a la idea que tiene la mayoría de la gente respecto a la felicidad en la vida, considerada como una meta, como un estado, de alguna forma constante, que puede ser alcanzado por determinados medios; cuando en realidad la felicidad debería ser buscada en la mayor cantidad de tareas posibles y a lo largo de cada día. Precisamente ese es el problema que tiene esta concepción, ya que en el afán de conseguir ese estado de felicidad la persona se olvida de vivir el camino, se toman las actividades, en su mayor parte, meramente como un trámite que queremos que ya termine.

Se empieza la semana planificando lo que se podría llegar a hacer el sábado, se entra a trabajar sin ganas, reconfortándose solo en la idea de que ya faltan unos minutos menos para la hora de salida, se estudia para aprobar, para obtener un numero que no significa nada si lo aprendido se limita solo a eso.

No se busca la satisfacción interna desde lo espiritual, los valores, la familia o el amor, sino que todos esos espacios que hoy aparecen cada vez más vacíos buscan llenarse con objetos, que nos prometen cierto sentido de totalidad e identidad, pero que a fin de cuentas solo sirven como una especia de anestesia para lo que en realidad nos falta.

Las personas terminan por olvidarse de su propia identidad tratando de encajar en un grupo, intentan ser únicas comprando cosas que nunca fueron pensadas para venderse de a una. Cada uno de nosotros encuentra un hilo que promete conducir a algo profundamente personal, en una trama tejida con deseos que son comunes.

Siempre se busca lo nuevo, porque lo actual ya es conocido y por lo tanto aburrido, nunca se está satisfecho con nada. Estoy de acuerdo en que el sentimiento de esperanza de encontrar algo mejor, o de estar mejor, es lo que motiva al progreso y a seguir adelante, pero esto es hoy llevado al extremo, de manera que en el momento que uno adquiere lo que tanto deseó un día, ya está deseando algo más que aparece como aquello que por fin nos va a hacer sentir completos.

Siguiendo este patrón de comportamiento uno jamás llegaría a estar completamente satisfecho y no nos lleva a otro lado más que a la desesperación e impotencia por alcanzar un lugar que en realidad no existe, por lo menos fuera de nosotros, sino que está en nosotros, en los que nos rodean y que trasciende lo material.

No hay espacio para la reflexión, son pocas las personas que se toman unos minutos para pensar en su vida, en lo que realmente desean conseguir a largo plazo y en el plano de lo sentimental y espiritual.

Regidos por este comportamiento no podemos obtener más que pequeñas muestras de felicidad que duran muy poco tiempo y que si no conseguimos abstraernos de esta manera de pensar vamos a vivir cada día sin darle ningún significado a nuestra vida que supere lo material.



Ignacioooo